viernes, 24 de julio de 2020

LA COHERENCIA

LA COHERENCIA

El semáforo se puso amarillo justo cuando él iba a cruzar en su automóvil y, como era de esperar, hizo lo correcto, se detuvo en la línea de paso para los peatones, a pesar de que podría haber rebasado la luz roja, acelerando a través de la intersección.
La mujer que estaba en el automóvil detrás de él estaba furiosa.
Le tocó la bocina por un largo rato e hizo comentarios negativos y vulgares en alta voz, ya que por culpa suya no pudo avanzar a través de la intersección... y para colmo, se le cayó el celular y se le corrió el maquillaje.
En medio de su pataleta, oyó que alguien le tocaba el cristal de su lado. Allí, parado junto a ella, estaba un agente mirándola muy seriamente.
El oficial le ordenó salir de su coche con las manos arriba, y la llevó a la comisaría donde la revisaron de arriba abajo, le tomaron fotos, las huellas dactilares y la pusieron en una celda.
Después de un par de horas, un agente se acercó a la celda y abrió la puerta.
La señora fue escoltada hasta el mostrador, donde el agente que la detuvo estaba esperando con sus efectos personales.

- Señora, lamento mucho este error —le explicó Maruo Castro, el agente–.

Le mandé bajar mientras usted se encontraba tocando la bocina fuertemente, queriendo pasarle por encima al automóvil del frente, maldiciendo, gritando improperios y diciendo palabras soeces.

Mientras la observaba, me percaté de que:
- De su retrovisor cuelga un rosario.
- Su auto tiene una calcomanía que dice: "Jesús te ama".
- Su patente tiene un borde que dice "Amor y paz".
- En la parte de atrás hay una oblea que dice "La paciencia es la madre de las virtudes”.
- Otra calcomanía que dice: "Practica la meditación".
- Y, finalmente, la imagen que dice: "Respeta al projimo"

¡Como es de imaginarse... supuse que el auto era robado!

Esta historia muestra la importancia de ser coherentes entre lo que pensamos, lo que creemos, lo que decimos, y lo que hacemos.

jueves, 9 de julio de 2020

Progre.

No se puede generalizar, pero por desgracia estamos formando una generación así.


viernes, 17 de abril de 2020

Muñeco de madera

 
 
Muñeco de madera

No había nada que Eliseo deseara con más intensidad que ese muñeco de madera de brazos livianos; parecía tener la habilidad de volar, porque al sus brazos rozaban el aire con una elegancia que el niño sentía que en cualquier momento podría encontrarlo flotando en el aire como un barrilete. Cada tarde pasaba por la juguetería, lo miraba desde la vidriera y observaba su precio. Nunca había visto tanto dinero junto. Sabía que jamás podría tenerlo. Sin embargo, apoyaba la nariz contra el vidrio, miraba sus ojos y esos brazos y volaba por un ratito.
 
Una tarde, el dueño de la juguetería se le acercó y le preguntó por qué siempre se quedaba ahí, inmóvil. El chico sintió tanta vergüenza que se fue corriendo. 
 
Durante unas semanas, aunque sentía profundos deseos de hacerlo, no apareció por esa calle.
 
Cuando finalmente ya no pudo más con sus deseos de ver al muñeco, fue a la vidriera cauteloso, intentando que nadie lo viera. El muñeco de madera no estaba. Se quedó un rato, observando cada esquina del escaparate, anhelando encontrárselo en una esquina sin poder calmar esa tristeza. Durante toda la semana fue hasta la juguetería. La ida desde su casa era amarilla, iluminada por la esperanza de encontrarse con su amiguito; pero la vuelta era de un gris oscuro intenso, ya no volaba su imaginación, solamente sentía tristeza y desánimo.
 
Pasó el tiempo y lentamente Eliseo fue olvidándose de esa extraña fascinación. Muchos años más tarde, pasaba por casualidad por la juguetería, a cuyo escaparate ya no iban sus ojos, y al rodear la esquina descubrió que apoyado en el vidrio había un niño que observaba intensamente un muñeco de madera idéntico al que amara en su infancia. Entró, saludó al juguetero y compró el juguete. Al salir, el niño había desaparecido. Lo buscó durante días, deseando darle ese juguete, hasta que finalmente desistió.
 
Una tarde, al volver del trabajo, sus ojos se toparon con los puntos negros del muñeco de madera; lo miraba profundamente y lograba llegar a un sitio de su ser al que ni siquiera él se atrevía a mirar: un sitio donde volar era posible y a donde sólo esas manos de madera podían llevarlo.
Escrito por Tes Nehuén en Cuentos con moraleja.

lunes, 6 de abril de 2020

Pedro Sánchez, dimisión.



Un mes de confinamiento y crece mi grado de indignación con el miserable gobierno y el aborregamineto al que hemos llegado los ciudadanos. Aplausos por las tardes a los sanitarios mientras el gobierno los envía al matadero por no entregarles medios de protección. "De esto saldremos todos juntos", sí, unos al paro, otros al cementerio, y ellos, la casta, seguirán viviendo a cuerpo de rey. Más de 12.000 fallecidos y las TVs con reportajes de lo bien que se lo pasan las familias en casa con los niños cantando en familia. "Esto es cosa de todos", que se lo pregunten a los familiares de los fallecidos, y mientras los ciudadanos cantando "Resistiré". Más de 100.000 infectados, y no hay medios de protección para los sanitaros, policías... pero para el gobierno y sus familiares no les falta de nada. No hay dinero para los autónomos, para comprar material de protección, ayudas a las familias... pero se subvencionan las TVs afines al gobierno con más de mil millones de euros. Sociedad aborregada, anestesiada, idiotizada, ya pasará esto y veremos los que cantan en los balcones que cara les queda cuando lleguen a trabajar y se encuentren las puertas cerradas de su empresa o cuando familias enteras vayan al paro. Eso sí, seguiremos cantando el "Resistiré", bailando en los balcones y escuchando los discursos del "predicador" Pedro Sanchez que nos amenizará las veladas.


miércoles, 29 de enero de 2020

MEVLANA




HAZRATI MEVLANA MUHAMMAD YALAL UD-DIN RUMI

Mevlana, nació en Balkh (Actualmente Afganistán) el 30 de septiembre de 1207 y murió en Konya, Turkia, el 17 de diciembre de 1273. Es fundador de la Orden de los Mevlevis, o también conocida por la Orden de los Derviches Danzantes. Su padre, Baha Ud Din Walad, había adquirido gran celebridad de Teólogo y Predicador, conocido como el sultán de los Sabios.

Que podemos decir de Mevlana, que es un Océano de Conocimiento, fue el más grande erudito de su tiempo, doctor en ciencias y en ciencia religiosas, y maestro de más de diez mil discípulos. No obstante, cuando conoce a Shams de Tabriz, Su Maestro, que si lo pudiéramos trasladarlo a nuestro tiempo, sería como encontrase con un vagabundo; decíamos pues que en su encuentro Shams, con su simple presencia transforma a Rumi, y de doctor en ciencias, se transforma en un hombre de Dios. En su encuentro con Shams, el Sol, Rumi se transforma en Luz, y a partir de ese momento, el Amor es la Fuerza Universal de Su Vida y de su Escuela. A Mevlana se le conoce en la tradición Sufí, como el Polo del Amor. Su obra y su vida se transforman, así como su Escuela. A partir de ese momento, escribe sus obras el Diwan, más de 25,000 poemas espirituales de gran profundidad y amor.

El Fihi Ma Fihi, que significa el Camino Interior, o en Esto está lo que está en Esto. Y su obra monumental, el Masnavi, compuesta de más de 4,000 poemas, historias y cuentos, que escribió durante 43 años, y se le conoce en el mundo El Corán Persa.

Es importante, señalar que su Escuela de Conocimiento, es una escuela universal, del estudio del hombre y proporciona las alas para el vuelo espiritual. La escuela de Mevlana, aglutinó en su tiempo, a personas de todos los credos y las razas, que acudían con el Maestro, para el Despertar del Alma.

Mevlana Rumi, instituyó la Sema, o Danza Cósmica de los Derviches, cuenta la historia, que un día Mevlana se encontraba caminando en las calles de Konya, y en la calle estaba un herrero golpeando con su martillo el metal, y al golpetear el martillo, el sonido, produjo en Mevlana que iniciará la Remembranza en su corazón del Sagrado Nombre de Dios: Allah, y sumergido en el Recuerdo de Dios, su Alma empezó a girar, como un concierto de las estrellas del universo alrededor del Sol Divino, y así, con está danza cósmica, con está oración en movimiento, Mevlana, se aniquiló en la Luz de Dios, cómo la mariposa, que en su vuelo de amor, vuela hacia la flama del fuego, y con su aniquilación en el fuego, se convierte en Fuego y Luz.